¿Qué es ser amigo?

Siempre creí que “el mefis”, “el narizón” y “el colores” eran mis amigos, porque me sentía comprendido por ellos cada vez que necesitaba drogarme, porque nos felicitábamos cada vez que hacíamos un atraco o por el simple hecho de compartir nuestra forma ingobernable de vivir. Hoy después de varios años de militar en DA veo las cosas en retrospectiva y me doy cuenta que esos a quienes yo decía eran mis amigos no eran más que mis cómplices de adicción. La primera muestra de amistad que tuve en mi vida fue en el primer día que llegué al grupo, cuando unos desconocidos me invitaron a pasar y me dijeron su nombre ofreciendo ser mis amigos si yo así lo quería, eso no lo olvidaré nunca.

No es solo la necesidad de dejar de drogarme lo que me hizo quedarme en el grupo, también la necesidad de amigos porque en realidad nunca los tuve y si los tuve me abandonaron por mi vida ingobernable y creo que hicieron bien en hacerlo pues ellos debieron de seguir su camino y respetar el mío que era ya muy equivocado con el peligro de arrastrarlos. ¿Por qué un auxiliar de albergue debía cuidarme si ni siquiera fue mi valedor de drogadicción y ni siquiera conocía a mi familia? Las veces que me quería ir ese auxiliar estaba ahí cuidando de que no me escapara, habló muchas veces conmigo para que no me fuera, me ponía a hacer servicios que me mantuviera ocupado y dejara de pensar en drogarme, ese auxiliar resultó ser más aferrado que yo, como si su misión en este mundo fuera cuidar que no me escapara, porque déjenme decirles que fui muy latoso cuando nuevo, siempre me quería ir, pero gracias a ese auxiliar y que hasta el día de hoy sigue en DA, me ayudó a no volver a drogarme, después de que me caía mal porque solo estaba atrás de mí y me resentí con él, después de que le menté su madre muchas veces, mentalmente, ahora vivo agradecido con ese chaparrito que hizo su servicio y me cuidó a pesar de que yo soy de más edad que él.

Un amigo se puede encontrar en cualquier momento de tu vida, hay mucha diferencia entre tener un amigo y un conocido, al conocido le contestas que estás bien cuando él te pregunta cómo estás, aunque te esté llevando el diablo y al amigo le dices exactamente cómo estás, al conocido lo saludamos y la plática puede ser muy breve y con el amigo te quedas hasta horas hablando de ti, de él, de los demás, de su trabajo, de su situación familiar o del trabajo o escuela, no sé, con el amigo hablas de todo y le dices todo con la confianza total, con él eres tú sin tener que fingir falsas caras o poses.

En ocasiones sucede que de todos los conocidos que tenemos puede haber un buen amigo, es solo que no nos damos la oportunidad de conocerlo bien porque para tener una buena amistad con alguien hay que conocerlo en vivo y a todo color, los amigos que haces por Facebook en realidad apenas entran en la categoría de conocidos porque solo sabes de la existencia de una imagen, de una foto o de un nombre real o inventado, sabes que del otro lado de la computadora hay alguien que respira, pero es todo lo que sabrás de él, podrás charlar vía Messenger con él o ella, según como se haya presentado ante ti, porque aún estará la duda si es mujer, hombre, adulto, niño, adolescente, travesti, gay, protestante, ateo, delgado, gordito, si acaso tiene gula, pereza, soberbia o quizá muchas virtudes, no es posible que escuches el tono de su voz y mirar a sus ojos cuando te dice algo de él y entonces veas su sinceridad o su dolor, es casi imposible hacer amigos así, es solo una personalidad fantaseada.

Es tu amigo porque es real, existe ante tus ojos y puedes apretar su mano, un amigo es una fortuna en la vida de cualquier persona, aunque en mi experiencia la amistad atraviesa por innumerables desacuerdos, resentimientos y malestares con la persona, parece ser que un drogadicto logra conocer la amistad por esa vía y, es que, nadie está preparado o nace sabiendo ser amigo, pasa lo contrario porque nosotros los drogadictos solo usamos a las personas para nuestro propio bien, si fue necesario traicionar o ser cómplices lo hicimos, nunca soportamos a las personas que nos quisieron decir cómo vivir o aquellas que quisieron decirnos la negativa vida que llevábamos, nos molestamos cuando se metían con nuestra drogadicción o nuestro carácter o nos íbamos al otro extremo, dependíamos demasiado de las personas por soledad y miedo de enfrentar la responsabilidad de vivir y tomar las decisiones de nuestras acciones hasta soportar humillaciones y abusos con tal de que esta persona no nos abandonara y la veíamos como amigos cuando en realidad era una relación totalmente destructiva.

¿A cuántas personas no explotamos, chantajeamos o manipulábamos para lograr  nuestros deseos egoístas? ¿A cuántas personas quisimos gobernar y controlar, sin respetar su forma de vivir, metiéndonos en su libertad y vida personal? Un amigo debe cuidar sin sobreproteger, un amigo te dice la verdad y les diré que esto es de lo más complicado porque en ocasiones no tenemos el valor de hacerlo por miedo a que el amigo se moleste y lo perdamos, tenemos miedo de que le duela lo que le voy a decir y para hacerlo hay que tener valor y amor al amigo aunque el hacerlo duela más.

¿Te ha pasado que cuando al amigo le aconsejas y hace todo lo contrario a tu consejo, te resientes con él y hasta lo regañas? Si te ha pasado esto es porque aún hay mucha inmadurez en tu forma de ser amigo.Hace poco escuché un tema de Don David y me gustó una frase que dijo: “Yo no te juzgo, ni te condeno, yo te ayudo con un consejo o sugerencia y a ti te corresponde llevarla a cabo o no y seguiremos siendo amigos”, esa es amistad, con madurez, porque los amigos te ayudarán a que resuelvas tus problemas,ellos no harán lo que a ti te corresponde hacer, un amigo te ayuda a que enfrentes las consecuencias de tus errores y decisiones, nunca te dirá cómo evitarlas, un amigo te dirá la verdad aunque te duela y a ver si aun así tendrás el valor de agradecerle, un amigo sufre contigo pero no se hundirá contigo, si es al final de cuentas tu decisión.

Si quieres ser un buen amigo necesitas hacer a un lado tu egoísmo y soberbia para aceptarlo tal y como es, ser honesto y más en estos tiempos de mentiras, ser fiel, leal y sobre todo perdonar cuando el amigo te falle, hay amigos que fallan y mejor se van, hay otros que fallan pero piden perdón y ayuda, esos son los buenos. No esperar gratificación o recompensa alguna de su parte, que si no te llama por teléfono tú llámalo, aunque te conteste con un: “¡Qué fregados quieres!”, ya sabes que él es así pero que en el fondo esperaba tu llamada.

Al final de la noche que pareciera ser eterna, el amigo está ahí aunque sea para escucharte y darte tal vez no lo que quieres pero si lo que necesitas. DA está lleno de amigos, esos amigos que se hicieron familia al pasar los años de servicio, unidos en las buenas y en las malas, los amigos que están ahí en los fracasos pero también en los triunfos, los amigos que luchan por y con lo mismo, los que profesamos una misma fe y un mismo creador, los que nos compartimos secretos de cómo educar a nuestros hijos, los que nos contamos chistes y nos reímos de nuestros defectos, los que nos “ampuleamos” para mantener al ego a raya, los amigos que ven por el bienestar de la comunidad, los amigos que están en mi corazón porque se lo ganaron.

Con gran cariño: Moisés Dueñas